« Home | El guía se rascó la cabeza varias veces y contiuó ... » | dudo, luego... » | Sí, es cierto. Veo muchas cosas desenfocadas. Es p... » | Un amago de querer, y tres elementos más Para ... » | dicotomía al vacío » | momentos circulares"He decidido volver atrás, y re... » | Ella salió de casa con la vía láctea... pero a par... » | nueva ventana tras el solsticio »

Qué susto y qué miedo...



Me empecé a preocupar cuando me di cuenta de que un hecho empezaba a hacerse irremediable, a hacerse costumbre: la vuelta ya ni me pesa ni me importa. La ida no me despierta casi nunca angustia por su prolongación...

Creo que es algo científico. Y hay dos ejes por los que me moveré hoy. Uno de ellos es que la ida en un viaje siempre dura más, aunque la vuelta llegue con caravana incluida. El otro tema del que quería hablar hoy es de que ya casi no noto mariposas cuando viajo. De hecho lo hago en ocasiones, siempre, por rutina... Y que este verano entre unas y otras cosas deja de tener sentido. Y que me siento tan extraña que ni siento el tiempo.
Que me ha dado una tregua y me ha dejado atontada.

Todo empezó en junio. Creo que aún no soy consciente de que no estoy cumpliendo ni uno sólo de mis planes de futuro. Que pronostiqué cosas que quizá nunca cumpla. Y que estoy, por contagio, o porque sí, perdiendo la ilusión en casi todo.
Que no sé ya si me gustar lo que siempre me gustó. Y que es raro, no puedo o no sé cómo digerir que no me gusta lo que siempre me apasionó. Que no me gusta, no es eso... no es eso exactamente, no es que no me guste, es sólo que no me apasiona igual; que no me sale bien, que no sé si soy buena en eso.

Y que ya no sé en qué sería buena. Y qué es un poco raro hacerse mayor y ver que nunca podrás serlo del todo si no empiezas a vivir por ti mismo!!

Pero bueno, es que el tiempo pasa tan tan.. nnnn deprisa que no me doy cuenta de nada, que no puedo pararme a repasar. Son preguntas estúpidas que de hacerlas otra persona me reiría en su cara, por descontado. Es inútil...

Mañana seguiré pensando.
Pero mañana casi ya es hoy, porque tengo la mente puesta en lo que haré mañana, efectivamente.
Y que esto es una auténtica locura.
Que se nos va de las manos Belén! lo perdemos. Jajaja!!!
Pero bueno, suerte que estuve con Nana este finde, y que me reencontré conmigo un poco más. Como yo era, con treguas y sin ellas. Y que me hizo olvidar cosas malas. De gente mala, y con actitudes aún peores.

Hasta pronto!

Mucho de lo que dices tiene que ver con el desencanto natural que llega con la edad y la vida, y la situación en la que te encuentras...

Al final, afortunadamente, la mayoría de las cosas se acaban poniendo en orden. Date tiempo, que es lo que corresponde en época de cambios ;)

Los cambios vienen con los años, no tiene que ser irremediablemente por hacerse mayor, aunque eso también ayuda. Es tu corazón el que no debe hacerse demasiado mayor, al menos al estilo que se espera.
Las cosas cambian a nuestro alrededor, esa es la belleza de la vida, y suerte es que se nos muestre ante nuestros ojos dichos cambios.
Dicen que es el movimiento lo que aporta vida, pues movámonos.

GATO NEGRO

y q los años se posan en los hombros y pesan un poco más, y parece q ya nada brilla como antes...hasta q un día, con ojeras y cansada, te mires en el espejo del ascensor y te reencuentres a una niña sonriente con ganas por hacer cosas nuevas...

...y entonces volverás a reirte de veras (como en la canción de quique)

abrazos ausientes desde un norte primo

(pd.- tienes un e-mail...)

Me he sentido dentro de tus letras, ahí agazapada sabiendo que me identifico hasta con los silencios. Y eso tampoco ayuda. Quiero creer que es el tiempo en el norte en este no-verano, pero sé que no, que es hora de mirar al espejo y (re)plentear los cimientos. Que nos somos tan viejas como para cansarnos tan pronto joe ;)

dicen que la madurez es asumir la perdida de algunos de nuestros sueños. yo odio esta frase.. pero me obsesiona su posible verdad. Quizá nos hace falta volver a construir sueños.. aunque cada vez nos sea más difícil creernoslos quizá cada vez sean más posibles. no sé.
un abrazo siempre con preguntas.

Post a Comment

Escribo para ti, para mi, para contarte y que descifres cuando quieras lo que necesites. Para hacerte recordar, para guiñarte un ojo, para darte la mano, para sonreír contigo... Gracias por comentar

Remite


  • kay

  • Llegué por casualidad y por una conversación de cafetería envuelta en dudas. Encontré en los paraísos electrónicos los abrazos más auténticos... viajé sola por Kioto, por Dresden, embotellé lluvia y suelto lastre. Ahora sólo escribo, de oficio. Y en septiembre de 2009, años después de posarme para aterrizar, vuelvo a emprender una aventura voladora; desnuda y rellena de letras. bienvenido
radiografía
Users Online

tinta y prosa
y letras e historias con máscara
y cristales rotos...
y tus ojos, reinterpretándolo todo



Creative Commons License
Esta obra
está bajo una
licencia de
Creative Commons